Esta entrada va
dedicada a una de las asignaturas que hemos tenido durante el primer semestre
de este curso, Educación Plástica y Artística. Gracias a ésta me ha permitido conocer y saber
que no es necesario únicamente papel y bolígrafo para aprender y disfrutar
aprendiendo del arte, rompiendo con ello la concepción tradicional del
conocimiento.
¿Todo es arte? ¿Qué
concepción tenemos de ella? ¿Creéis que es importante para el desarrollo y la
creatividad de los niños (entre otros aspectos)? ¿Cómo la podríamos trabajar
dentro de nuestra aula con los alumnos?
Ahora entiendo
la importancia que tiene para los docentes el trabajo de los dibujos, de la
experimentación y de la libertad intelectual en los niños.
¡Todos podemos aprender dibujando! |
- PRIMERA LÁMINA: ¡SOMOS PECES EN LA CERA!
La primera de
las actividades que más me han gustado ha estado la realizada con ceras en las
que aparecían animales del fondo marino. Para ello, eran necesarias dos láminas
de dibujo: una primera para realizar los
peces, plantas deseadas y después se
repasaban con bolígrafo, de manera que en la segunda lámina (en la cual se
habrían pintado diferentes formas y
colores) quedaran plasmados los peces en la cera.
Fue una bonita
experiencia muy gratificante, significativa y divertida al mismo tiempo.
Porqué a medida que ibas realizando tu
dibujo tenías muchas ganas e ilusión por ver el resultado final. Así como darme
cuenta de cómo con dos materiales y tú mismo eres capaz de crear un dibujo que
realmente te puede gustar mucho. Así como pudiéndolo utilizar en las aulas con
los alumnos.
Realmente es
cuando empiezas a hacerlo es cuando te das cuenta de lo que eres capaz de
hacer. Por esta razón, he escogido está lámina. A medida que iba realizándola iba
disfrutando, intentado en todo momento sacar lo mejor de mí.
Cuando empecé a
realizar el dibujo tenía en mente que lo que quería era abrir nuevos
horizontes, nuevas técnicas así como enriquecerme de nuevas experiencias (las
cuales podrían serme útiles en cualquier momento de mi vida, y que podría
aplicar en las aulas). Es decir que las
ceras me ayudaron a darme cuenta de que existen diferentes funciones y que se
pueden obtener diferentes resultados teniendo en referencia nuevas ideas para
crear.
Además decir que
para mí el volver a coger las ceras como material, me recordaba a mi infancia.
Así como el material que tenemos en la segunda lámina, que es la tempera.
A continuación os dejo el dibujo de ceras realizado.
- SEGUNDA LÁMINA: ¿TEMPERA?
Como sucede con
la primera lámina, la textura de la tempera me hacía recordar a mi pasado, a cuando iba a clase y disfrutaba gozando con
la textura.
Volví a sentir
la misma sensación que tuve siendo más pequeña, la de gozar con plenitud lo que
hacía. Cada minuto que transcurría, eran sinónimo para mí como medio segundo.
El cual este medio segundo era yo misma, era de libre pensamiento, sin
presiones ni obligaciones.
En este caso, se
realizaría de manera libre, utilizando diferentes colores y en 35 espacios
diferentes tonalidades de color, en este ejemplo eran azul cian, magenta,
amarillo y blanco.
Desde un
principio tuve claro lo que quería hacer, quería conseguir en un círculo con
tonos azules-morados en los extremos y en el centro rosáceos- verdes y
amarillos. Para ello, iba realizando en pequeñas proporciones un color en
función del resultado que quería obtener.
Pese a que
el dibujo necesitó varias horas para que
se llevara a cabo, comentaré que en todo momento estaba dispuesta a pintar, ya que para mí, las temperas son
unos materiales muy relajantes.
En resumen, he podido apreciar de primera mano, como en unos meses, he podido aprender nuevas herramientas y técnicas del dibujo que me serán útiles en mi futuro docente.
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